¿Qué pesa más, el ancla o el miedo a saltar?
¿Qué nos frena? 🌊
Hoy quiero compartir algo de una experiencia personal que vengo atravesando, y de la cual estoy reflexionando mucho últimamente.
Quizás te resuene, porque siento que es una situación por la que muchos pasamos en algún momento:
El otro día pensaba que a veces nos encontramos como en un crucero de lujo (nunca estuve en uno de hecho, pero se me vino a la mente esa imagen). Es confortable, seguro, tiene todo lo que aparentemente necesitamos y parece ideal. Pero con el tiempo, nos damos cuenta de que estamos anclados en el medio del océano, viendo el mismo amanecer y el mismo atardecer, día tras día.
Este crucero puede ser un trabajo que ya no nos motiva, una relación que no nos suma, o una rutina que sentimos que nos deja estáticos. En mi caso, estoy navegando estas reflexiones ahora mismo, preguntándome qué cosas me mantienen en ese barco y qué horizonte quiero explorar.
El crucero de lujo: ¿Qué estamos dejando pasar?
Imagina lo siguiente: estás en un barco hermoso, con paisajes increíbles y todas las comodidades que podrías desear.
Pero, aunque todo parezca ideal, cada día ves el mismo amanecer, el mismo atardecer.
No hay movimiento, no hay nuevos destinos.
Muchas veces nos aferramos a un trabajo bien pago, una relación cómoda o una rutina conocida porque nos hacen sentir seguros.
Sin embargo, la seguridad no siempre significa felicidad ni propósito.
¿Y si nos animamos a saltar? 🛶
¿Qué pasaría si soltamos ese crucero y nos dejamos llevar por las corrientes del océano?
Saltar hacia lo desconocido da miedo, pero ¿acaso no es ahí donde encontramos los desafíos que nos transforman?
Como refleja Hermann Hesse en su novela Siddhartha:
"El miedo a perder lo conocido es el mayor obstáculo para encontrar lo extraordinario."
Moverse hacia lo incierto no significa perder todo, sino descubrir nuevas formas de bienestar, conexión y alegría.
Lo que tenemos miedo a perder, no desaparece
Muchas veces creemos que al soltar algo, lo perdemos para siempre:
💡 ¿Un buen ingreso? Puede aparecer en otro contexto.
💡 ¿Comodidad? También existe en otros horizontes.
💡 ¿Conexión? Nuevas relaciones pueden traerte aún más valor.
Lo que realmente importa no desaparece. Simplemente cambia de forma.
Si te animás a explorar, vas a encontrar nuevas maneras de llenar tu vida con lo que más valorás.
¿Cómo soltar el ancla?
Si sentís que estás anclado/a, acá te dejo algunos pasos simples para empezar:
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Identificá tus anclajes:
Hacé una lista de lo que te mantiene estático. A veces, solo reconocerlo ya es liberador. -
Empezá de a poco:
No hace falta un cambio radical. Probá cosas nuevas, incluso pequeñas: un curso, un hobbie, una salida diferente. -
Preguntate qué te hace vibrar:
¿Qué cosas te emocionan? Reflexioná sobre qué te da propósito y energía. -
Confiá en el proceso:
Soltar no significa perder; significa crear espacio para algo nuevo. -
Aceptá el miedo como parte del viaje:
Lo desconocido siempre asusta, pero es también donde están las mayores recompensas.
Un océano de posibilidades
El océano es inmenso, lleno de colores y emociones que aún no conocés.
Soltar el ancla es atreverte a explorar ese horizonte, con la confianza de que lo que importa seguirá allí, de nuevas y mejores maneras.
🌊 ¿Y si nos animamos a saltar? 🛶
Con cariño,
Eugenia.

